Hoy os queremos contar algunos de las grandes antigüedades consideradas auténticos tesoros que están desaparecidos en el mundo.

Uno de ellos es por ejemplo el retrato de Francis Bacon de Lucian Freud. Se sabe que se vendieron hace cinco años por 142 millones de dólares, el más alto por una subasta de arte pero que ese mismo año fue comprado por la Tate británica pasando por varias exposiciones hasta desaparecer. Y es que en 1988 durante una de esas exposiciones, alguien lo sustrajo y desde entonces no ha vuelto a aparecer a pesar de que se estima que tiene un valor de 45 millones de euros.

El Templo de Salomón en Jerusalén donde según la Biblia Abrham subió para sacrificar a su hijo Isaac fue saqueado varias veces y destruido por completo durante  las guerras del medio Oriente en la antigüedad,

El mural de Diego River: El hombre en el cruce de caminos» pertenecía a un magnate de Estados Unidos: Nelson Rockefeller pero que desapareció y podría tener un valor de 12,7 millones de euros y con posibilidad de triplicarse incluso.

«El campesino catalán en rebeldía» de Joan Miró desapareció tras terminar una exposición en París cuando fue desmontado y supuestamente iba trasladado a Valencia pero del que se pierde su pista creyendo que se destruyó.

El «Real Alcázar de madrid» despareció cuando en Navidad de 1734 se incendió para dar lugar al mayor palacio de Europa que existe hoy y que se contruyó sobre este solar. Aunque se rescataron joyas como «Las Meninas» otras muchas fueron pasto de las llamas.

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